La
Sociedad Hidroeléctrica del Chorro, propietaria del Salto del
Gaitanejo y del Salto del Chorro necesitaba un acceso a ambos para
facilitar el paso de los operarios de mantenimiento, transporte de
materiales y vigilancia. Las obras empezaron en 1901 y terminaron en
1905. El camino comenzaba junto a las vías del ferrocarril recorría
el Desfiladero de los Gaitanes. En 1921 el rey Alfonso XIII fue a la
inauguración de la presa del Conde del Guadalhorce cruzando para
ello el camino previamente.
A partir de ese momento se le empezó a
llamar
Caminito del Rey.
Con
el transcurrir de los años se produjo su abandono y también su
falta mantenimiento, su estado fue tan lamentable que desapareció la
barandilla de protección en casi toda su extensión, fue lugar muy
concurrido por excursionistas y por aficionados a la escalada
circunstancia que propició numerosos accidentes a lo largo de los
años. En el año 2001 la Junta de Andalucía cerró los accesos y
demolió su sección inicial al camino como consecuencias de varios
accidentes mortales.
La
Diputación Provincial de Málaga, en colaboración con la Junta de
Andalucía incluyeron en sus presupuestos del 2006 un plan de
restauración. En enero de 2009 salió a Concurso la realización del
proyecto para su reparación. Una vez rehabilitado se abrió al
público el 28 de Marzo de 2015.
LA
PETICIÓN DE RESERVA- Con el tiempo y la antelación que estas cosas
requieren se hizo la oportuna reserva para los siguientes
caminantes del Grupo Raíles que se habían interesado.- Juan Ruiz,
Aurelio, Manuel Ponferrada, Manuel Borrego, A. Rodríguez, Herminio
Pérez, José Pérez, Guillermo Medina, siéndoles autorizada el
acceso por Álora cara Sur para el día 16 de Septiembre.
A
Juan Pastor Ayllón, A. Moreno, J. Gañán, Fernando Ruiz y A.
Rodríguez, que no los dejaron entrar en su día por fuerte aire y
prohibiendo la entrada les fue autorizada para el mismo día 16 pero
les correspondió entrar por Ardales o Norte, siendo la mayor parte
de este recorrido de bajada salvo el tramo final, una vez que se
pasa el puente colgante, de ahí que se pueda tardar una hora menos
en hacer el recorrido.
EL
DESPLAZAMIENTO.- De las inmediaciones Hotel Center a las 6,50 h nos
desplazamos a la malagueña población de Álora donde llegamos a
las 9,20 h. y derechos al Bar El Cruce a tomar el desayuno
consistiendo en un café con leche y unas ricas tostadas
antequeranas regadas con buen aceite del pueblo, durante el coloquio
de la tertulia se comentó el reciente fallecimiento el pasado día 13 de el compañero
de Veredas, Senderos y Caminos Manuel Guerrero
Molina, tras haber sufrido una incurable y larga enfermedad,
descanse en paz, el sepelio fue el día 14 en la iglesia de San
Nicolás.
Siguiendo
los consejos y recomendaciones para grupos que se desplacen en varios
coches y a la vista que unos nos correspondía la entrada por Álora
y otros por Ardales se concertó mutuamente que al cruzarse ambos en
el camino intercambiar las llaves de los coches, los cuales serían
aparcados previamente en los lugares destinados a este fin, con
ello se conseguía la ventaja de disponer de un vehículo a la
finalización del recorrido evitando con ello recorrer inversamente
el camino
.
Acabado
el desayuno llegó el momento que los que teníamos entrar por El
Chorro o Alora y que a los efectos es lo mismo teníamos que ir en
busca del lugar siendo desconocido e igualmente las carreteras que
conducen hasta aquel lugar, el amigo Juan Ruiz puso el coche en
marcha y al El Chorro, por fin dimos con la carretera después de
algunas dudas a las 10,15 h . ya habíamos aparcado y todos a la cola
de la Caseta de Entrada.
En
la Caseta presentamos la autorización y los D.N.I y nos
entregaron un casco de protección para la cabeza, un monitor formó
el circulo de aquellas personas que íbamos a subir nos dio muy
amablemente a conocer las normas de comportamiento durante el
recorrido y comenzamos la subida por una fatigosa e interminable
cuesta que finalice al lado de las escaleras que la sensación de
nunca acabar.
El
incomparable paraje llamado Caminito del Rey desde el mismísimo
Desfiladero de Los Gaitanes y Los Gaitanejos ofrece unos paisajes
únicos, sus insólitas y vertiginosas pasarelas son una maravilla
resultando una gozada pasar por ellas, hay mucha seguridad y
vigilancia, los paisajes que se van ofreciendo a la vista son
incomparables, aquí es posible poner a prueba el vértigo que
suelen causan las alturas a algunas personas, después ya arriba se
ve un frondoso Valle que al parecer se llama del Hoyo, luego entre el desfiladero de Los Gaitanes y
Gaitanejos los paisajes son
espectaculares, el río Guadalhorce visto desde arriba es una
preciosidad manifiesta, luego casualmente se dejaría ver el paso
de un tren de Cercanías que puso la nota de romanticismo al paisaje
y que la concurrencia muy atenta aprovechó para disparar una y otra
vez las máquinas de fotos, especialmente a la salida de un túnel
lástima que solamente unas pocas de esta fotos puedan adjuntarse al
bloc, hoy las ha habido como para dar y tomar.
Una
vez finalizadas las pasarelas comienza un sendero o pista forestal
entre pinos, por este lugar nos cruzamos con los cuatro caminantes
que habían salido de Ardales, una vez en la Caseta de salida
entregamos el casco y continuamos por esta pista que finalice en el
túnel o paso que conduce a la presa del Conde de Guadalhorce lugar
este donde teníamos previsto el reagrupamiento entre los dos grupos.
A
las 13 h. algunos de aquellos que habíamos entrado por El Chorro
finalizamos el recorrido quedando a la espera de los que lo hicieron
por Ardales mientras tanto hicimos alguna foto al sillón del rey
labrado en piedra así como a las aguas color verde turquesa de la
presa embalse Conde de Guadalhorce.
A
las 13,45 llegaron los que habían entrado por Ardales es decir Juan
Pastor y compañía, nos dicen si les acompañamos a visitar las
ruinas de Bobastro dada su proximidad, le decimos que nosotros lo
dejamos para otro día quedando en reunirnos a las 15 h. en el Bar
del Cruce para hacer la comida del mediodía.
Aquellos
que nos quedamos viendo las aguas del pantano desde arriba decidimos
marcharnos al Bar del Cruce en Ardales para tomar algo fresco y
algún aperitivo y allí tan ricamente nos acoplamos en la terraza de
la calle a la espera que llegaran los chicos que fueron al Valle de
Abdalaji que así se llama el lugar donde se encuentran las ruinas de
Bobastro y que Omar Ben Hafsun fue su adalid teniendo en jaque mate a
todo el Califato de Córdoba por allá del siglo IX.
Fueron
puntuales los chicos que habían ido a Bobastro a las 15 h. en punto
llegaron al lugar de la cita, comimos a la carta de aquello que a
cada cual interesó y a las 16,45 h. pusimos marcha y rumbo a la
capital del Califato Cordobés, al poco de estar circulando se recibe
un mensaje procedente de Juan Gañán que textualmente dice “aquí
estados pinchados, solos como perros” se le contesta con otro
diciendo que estamos apartados sobre el arcén de la carretera y que
nos digan que hemos de hacer, su respuesta fue que ya habían
restablecido la avería y que continuáramos, (fue una broma) a las 18,30 entramos en
la ciudad califal donde por cierto hacia mal tiempo y con ánimo de
descargar alguna lluvia, Juan Ruiz nos dejó en la puerta del Hotel
Center y Manolo Borrego y Aurelio se despidieron hasta otro día.
¡¡¡HASTA OTRA
OCASIÓN!!!
SENDERISTAS.-
Al
abandonar terrenos de la Piramidal Fuente de La Palomera tomamos el
sendero de arriba hacía terrenos feudos de La Viñuela, esta vez sin
pasar por el Sendero y Mirador de San José que los dejamos a un lado
para pasar por una estrecha Vereda sin denominación que alguno se le
ocurrió decir sin ningún tipo de argumento llamarse Sendero de
Loiuko Ulala, en realidad se hace más fácil de andar que el de San
José, a su vez su recorrido es algo más corto hasta enlazar con
el que proviene de Las Salesas.
A
las 9,10 h. hubo detención en la explanada del Santuario de Santo
Domingo para tomar el refrigerio o la clásica PARADA Y FRUTA como es
costumbre decir y a las 9,20 h. reanudamos el camino para bajar por
la cuesta de cemento existente junto la Hermandad de San Álvaro,
una vez abajo enderezamos el rumbo hacia la ya olvidada vereda de la
Cañada de Cabriñana o de Las Cenizas como le suele llamar el amigo
Manolo Borrego, una vez salvada la cadena que cierra el paso a
vehículos continuamos adelante; a medio recorrido de esta nos
desviamos a la derecha entrando por un tupido bosque de pinos y
comenzamos la escalada entre riscales donde a medida que vamos
subiendo el camino va adquiriendo mayor dificultad aconsejando
reducir la altura del bastoncillo o palo telescópico para facilitar
la subida, el terreno es árido y pedregoso y las escasas plantas
están secas al no haber llovido casi nada pero las vistas son una
maravilla.
A
las 10 h. alcanzamos la cota de máxima altura en la antigua Pista
de Aterrizaje del Seprona e iniciamos el camino de regreso a través
del sendero GR 48 dirección a la Conejera hasta salir al trozo de
carretera comprendido entre El Lagar de La Cruz y la Cuesta del
Cambrón o del 14% e ir en busca Sendero Cuesta del Villar y Cuesta
del Molinillo II bajando hacía Los Morales, Huerta de Hierro, La
Castilleja, El Duende y Portocarrero para finalizar la etapa a las
12,15 h. en Cruz de Juárez.
