Ayer miércoles día 16 de Junio había convocada reunión plenaria del Grupo de Senderismo "Raíles", al objeto de celebrar el cumpleaños de nuestro Decano, José Romero Poyato, con algún retraso debido a un cólico en la vesícula que impidió en su día hacer la celebración y entregarle un obsequio en recuerdo de su Grupo de Senderismo.
La concentración se había convenido a las 12,30 h. en el lugar conocido como el “CHIMEÓN” del Barrio Huerta de La Reina, el fuerte sol hizo que nos protegiésemos bajo las sombras de los árboles existentes en sus jardines hasta completar los asistentes al acto, el compañero Manuel Molina Doblas, había justificado su ausencia al tener permanecer en su puesto de trabajo en ese noble oficio de la enseñanza.
A las 12,50 h. nos desplazamos el Mesón “La Concordia” muy próximo a donde nos encontrábamos, ocupando silla para compartir mesa y mantel, la disposición de las mesas estudiada previamente permitía a las dieciocho personas mantener amena y distendida conversación con el resto de compañeros, aunque con los más alejados solo fuese posible por el infalible método de señas, en tanto degustábamos aperitivos regados con cerveza, vino de la tierra, y refrescos para los abstemios.
No se hizo esperar mucho tiempo para que la euforia en ese buen ambiente reclamara la presencia del amigo Enrique Aguilar Salmoral, para que con su tono, cadencia, elegancia y gracia se entonara por el "canto a Córdoba" de Pepe Marchena, que comienza:
Es morena y cordobesa
tiene aire de sultana
y corazón de princesa
En Córdoba la encontré
cuando en la feria de mayo
las treinta mulas compré…
Ya estábamos ambientados, y como se suele decir habíamos roto el hielo de la seriedad, ahora más animosos íbamos hablando y recordando temas relacionados con Pepe Romero, sus tiempos de actividad profesional, su carácter bondadoso, su exquisita educación, y otras cosas, nuestras andanzas por los caminos serranos durante más de doce años, y como no nuestra ruta Jacobea por el Camino de Santiago, al cumplirse precisamente en este día, los diez años que iniciábamos la marcha a Roncesvalles donde comenzamos el camino.
Llegó la hora de entregar el regalo homenaje y le correspondió a Gaspar Avilés Valle, quien previamente pronunció cariñosas palabras llenas de sabiduría a la vieja usanza, se dieron al abrazo y Pepe Romero en correspondencia y agradecimiento a la concurrencia pronunció palabras que salen del alma con cariñoso agradecimiento.
De esta forma dimos por finalizado este acto lleno de sencillez y que perdurará en el recuerdo.
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