SENDERISTAS.-
Avrelivs y A- Rodríguez
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Llegó la hora y el momento de emprender la marchar con dudas hacía donde dirigirnos, por supuesto descartando ir a las Ermitas dado el pésimo estado de su camino donde cada vez hay más piedras sueltas por allí esparcidas y que tanto molestan al pie; el espolón ya se ha plantado y ha dicho que de subir y bajar por allí nada, al menos por el momento, decidiendo ir a Los Morales en busca de la Cuesta del otro día aquella que decíamos subiendo que no acababa nunca y hacía allá emperejilamos hoy una vez más el rumbo entre dos luces de un amanecer bastante friolero con 3º de temperatura.
Cruzar avenidas callejeras a primera hora es un poema de dificultad de la cantidad de coches y demás vehículos que hay circulando por todos sitios, a nada que te descuides se meten encima aún con semáforo en rojo; cuando por fin pudimos cruzar hacía Portocarrero ya pudimos caminar con tranquilad y comienza la subida entre bonitos chalets como este que se ve en la foto; hoy tenía las puertas abiertas, por su aspecto la dicen La Casa Blanca aun habiendo muchas diferencias.
También por aquí ya empiezan a rebasar el galibo de altura las ramas de un naranjo hacía la calle, ya veremos lo que pasa a nada que exceden el límite.
En uno de aquellos momentos de la ascendente caminata echamos la vista a tras viendo a distancia entre las brumas mañaneras a un solitario caminante portando sus correspondientes bastoncillos, llevaba nuestra misma dirección y comenzamos hacer especulaciones respeto de quien podría ser, nos detuvimos esperando tenerlo más cerca y era el amigo Antonio Corpas González por lo que ni Antonio ni yo acertamos respecto a quien podría tratarse, tras los saludos nos acompañó hasta la intersección de una de aquellas calles cambiando su ruta.
La bruma por estos lugares cada vez se iba haciendo más espesa e intensa, al llegar al arco de Los Morales nos desviamos a lado derecho para tomar la segunda senda que nos aparece desde la entrada, no está reconocida como tal sendero se trata de un cortafuegos de mucha altura y con ciertas dificultades en todo su recorrido; en sus inicios hay que cruzar un inmenso y bonito prado de verdes tréboles de cuatro hojas y un pinar desde donde se inicia la tortuosa y lenta subida entre lentiscos, jaras y matagallos; las vistas suelen ser bastante bonitas desde allí arriba pero con las brumas y nieblas poco o nada dicen.
Al término de la subida nos detuvimos a las 9,45 h. a tomar el potásico plátano canario pero tuvimos que aligerar por el intenso aire frío que hacía por aquellas alturas, lo más rápido que pudimos volvimos a iniciar la marcha antes de quedarnos agarrotados a pesar que agradaba ver pasar los bandos de posibles grullas en formación surcando el cielo.
Hoy por fin dimos con la bajada que el otro día íbamos buscando, resulta fácil pasarse de ella al estar algo intrincada entre la extensa vegetación, pero la experiencia que nos ha dejado no resulta satisfactoria ni recomendable para nadie y mucho menos para bajar por allí solo, ya sabíamos de su dureza pero lo que no contábamos es que las bicis de montaña y las motos han destrozado todo aquello dejando una camino lleno de profundos rajones y costurones que pueden ser un peligro tanto de bajada como de subida; por otro lado las lluvias y sus escorrentías se han encargado de hacer lo demás horadando el terreno en múltiples lugares.
Una vez abajo cruzamos la carretera de Los Villares para entrar hacía terrenos de La Casería de San Pablo por un paso que han habilitado al haber cerrado la puerta que antes existía, entre antiguas viñas y secos sarmientos.
Luego caminando a campo a través cual perros lebreles en busca de la pieza de caza vinimos a salir a la zona del Tocornar, de aquí a un lugar que nunca anteriormente había estado era el Vía Crucis de Santo Domingo. 
Cruzando apriscos con olor a ganado chotuno tomamos el camino de regreso y volvimos a retomar la Vereda que nos permitió salir al Nido del Águila desde donde continuamos por el Sendero SL-A 92 de Las Salesas pero
La tronera en terrenos del Maimón ya está más grande a su vez han desplazado las enormes piedras que la tapaban y otra vez está al descubierto y la gente mayor pasando a tomar el sol que también es justo y necesario.
Cruzamos el Parque de La Asomadilla donde la Pasarela de unión con el Barrio del Naranjo al parecer ya está terminada en espera de ser inaugurada pero la polémica ya está servida y la pasarela sin funcionar.
Ahora los periódicos locales dicen que la obra de esta pasarela que ha unido el Barrio de Mirabueno con el Parque de la Asomadilla y ejecutado por la Gerencia Municipal de Urbanismo se ha hecho sin contar con la autorización del Consejo de Administración de EMACSA, pese a que era necesario el permiso de este viaducto cedido a la empresa municipal de aguas, Unión Cordobesa ya advirtió el pasado lunes de esta irregularidad.
¡¡¡¡Ya tenemos el lío servido y pasarela para rato!!!!
A las 12,45 dimos por finalizada la marcha de hoy en Santa Rosa
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