Aurelivs-J. Ruiz
M. Ponferrada
Félix-J. Gañán
y Guillermo Medina.
En los momentos de espera llegamos al acuerdo de hacer una marcha senderista a la Sierra para subir por la Cuesta de la Traición hasta el Lagar de la Cruz, lugar este donde se determinaría la continuación.
No tardaría mucho en asomarse desde una terraza en la acera de enfrente un enorme canino cancerbero de mucho volumen dando sonoros ladridos en señal de protesta, si bien para nada hizo deponer la actitud del caminante que estaba en su derecho de regular aquella irregular altura.
Fuimos pasando junto a las obras para la construcción de Viviendas del Plan Parcial Nº 3 "El Pretorio" en la zona del Cerrillo Bajo, esto avanza con mucha lentitud pero avanza, seguimos adelante hacia el Cerrillo Alto y Las Antas y ahora con dirección a la pedregosa Cuesta de La Traición por donde fuimos subiendo.
A las 9,40 h. tras haber subido toda la Cuesta de La Traición nos detuvimos en el lugar conocido como El Lagar de la Cruz junto a la piscina Assuan, allí volvió a aparecer el acompañante perrito, estando presente durante toda la parada que hicimos para tomar el refrigerio, el perro se sentía feliz y contento tal como si nos conociese de toda la vida, este llevaba un collar de cuero color verde y en el mismo llevaba insertado con rotulador negro en caracteres bien visibles un número de teléfono que indudablemente sería el de su dueño, le hicimos una llamada, otra y otra, sin obtener respuesta, ante ello se llegó a pensar que posiblemente el perro fuese abandonado como a veces ocurre cuando las personas se van de viaje, pero no cuadraba del todo viendo la raza y las características de este perro.
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Reanudamos el camino y también el dichoso perrito vino de acompañante pero al menos ya sabíamos el número de teléfono del dueño, atravesamos parte de la zona finca de la Conejera y al llegar a la del Altillo cortamos por el Sendero del Medio hasta llegar al lugar donde se encuentra la Casa del Guarda, allí el perro se desvió hacia ella y olisqueó, pero no le debió agradar el olor, nos buscó y continuó con el grupo, esta vez había que cruzar la carretera que une la parte comprendida entre El Lagar de la Cruz y la Carretera de Los Villares zona del 14%, aquí el perrito en cuestión estuvo a punto de ser arrollado por un camión, evidenciando que este animal no estaba acostumbrado a los vehículos de carretera.
Prosiguió el camino con nosotros hacia la bajada de Los Morales y como había que cruzar la carretera de los Morales-Córdoba donde suele abundar la circulación de vehículos de carretera le pusimos un cordel para poder controlar el paso en esta carretera ya que este dinámico animal corría más que los galgos pero sin control.
| Aquí le tuvimos que poner un cordelillo que llevaba el amigo Manuel Ponferrada |
Cruzada la carretera se le quitó el cordel que hacia el efecto de correa y el animal volvió a sentirse en libertad, tomó tal carrera que se perdió y ya no volvimos a echar cuentas de él.
Ya bajando por la zona de La Castilleja y El Duende volvimos a verlo desde lejos este corría desorientado, seguramente buscaba su domicilio sin poder encontrarlo, le silbé varias veces y una de ellas me atendió aprovechando el momento para colocarle de nuevo el cordel atado en el collar que llevaba puesto, al menos de esta forma podía controlarlo, en evitación que pudiera ser arrollado por algún vehículo de carretera
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| SADECO |

En estas condiciones llegó hasta mi domicilio donde le puse agua y comida, el perro se sentía feliz y contento a nadie extrañaba, con las mismas entre mi hija y yo lo metimos en el coche y a SADECO fuimos a parar para su entrega, le pasaron una máquina que detectó llevaba chip y el nombre del animal, así como del dueño, dato este que esta prohibido facilitar, este perrito atendía por el nombre de LINO, volvimos a hacerle una llamada al teléfono del dueño pero esta vez sí contestó, llegando al acuerdo de vernos en la puerta del Hotel Center para hacerle entrega del perrito.
Según manifestaciones del propietario de este perrito al hacerse cargo del animal manifestó que es de su hija, y que no es la primera vez que se le escapa, ha adquirido la habilidad de abrir la puerta metiendo la manita y se va a buscar novia, vive por la zona Finca de Los Ballesteros junto a Los Morales, el dueño se llama Alonso, a resultas se trata de una persona bastante conocida de una de las amigas de mi hija, la vida es un pañuelo.
¡¡¡HASTA OTRA OCASIÓN!!!



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