SENDERISTAS.-
Aurelio Martínez Navarro-
Juan Ruiz Lopera- Manuel Ponferrada
Navajas
Félix García Carrasco- Juan Serna Jiménez
Juan Gañán
Bejarano- Pedro Pareja.
Cuando
nos alumbraban los luceros del alba y con luna en fase de cuarto
menguante nos dirigimos hacia la parada del Bus frente a la estación
ferroviaria del Adif para tomar el de las 6,25 h. destino Cerro
Muriano, otros lo harían en la parada frente al Bar de Pepe el
Gordo.
A
la llegada a Cerro Muriano a las 6,57 h. cruzamos la antigua estación
del tren y en la explanada donde se configuraban las cinco vías
estaban los feriantes montando las casetas y sus artilugios para la
inauguración de la feria de Santiago y Santa Ana que tendrá lugar
entre los días 23 actual al 27.
A
las 7 h. comenzamos la caminata hacía el Camino de Los Pañeros
cuando el disco solar ya apuntaba a asomar entre las montañas por
el horizonte, todo un espectáculo de belleza que solo pueden
disfrutar los madrugadores.
Pasamos
por el complejo minero del Cerro de La Coja donde van apareciendo
las milenarias minas, le echamos un vistazo sobre la marcha
pensando que ya en el siglo I en tiempos de los Emperadores Tiberio y Calígula
este lugar estaba en pleno auge de explotación minera y
lo ha estado toda la vida pudiendo apreciar la existencia antiguas
tolvas y los lavaderos del mineral de cobre, así como verdaderas
montañas de escorias que en otros tiempos solíamos llamar “Las
Gachas Negras”, luego la famosa Piedra Horadada.
Descendemos
montaña abajo para ir alejándonos progresivamente de estos
lugares hasta entrar en una zona de cierta humedad donde abundan los
juncos y las adelfas, hay una cancela abierta que permite el paso y
nos anuncia Coto Privado de Caza, un arroyo cubierto de extensa
vegetación llamado Las Minillas donde suena el rumor de sus aguas en
el silencio de la mañana, las subidas y bajadas se van sucediendo
una tras otra que hacen resoplar con fuerza.
A
las 7,50 h. llegamos a una encrucijada de caminos que permite hacia
lado izquierdo caminar hacia La Tierna y a lado derecho hacía La
Alcaidía, optamos por este último, no tardando mucho en aparecer el
Guarda de aquellos lugares en un coche todo terreno, nos indicó con
mucha amabilidad que por aquel lugar no se puede caminar al tratarse
de una finca particular, no obstante cuando vio el pelaje de la
cuadrilla accedió después que Juan Gañán aparentemente le
convenciese.
Apareció
en la distancia la montaña llamada La Choza del Ahorcado y allá
que fuimos subiendo a campo a través dando un rodeo saliendo la
pista forestal que conduce a Alcolea por el Guadalbarbo, quedando
atrás el Cortijo de la Alcaidia sin haber pasado por el mismo,
continuamos camino adelante hasta llegar a una cancela que estaba
cerrada tratamos de abrirla pero el pasador lo impedía no se podía
mover, no quedaba otro remedio que salvar el obstáculo escalando
por encima hasta pasar al lado opuesto, seguimos camino adelante para
detenernos a las 9 h. en pleno campo terrenos finca de Román
Sánchez para beber agua y tomar el refrigerio.
Tras
reponer las fuerzas seguimos hacía Alcolea por la Vía Pecuaria y el
Camino Real hasta llegar a la barriada Los Encinares, aquí nos
detuvimos con brevedad para la reagrupación con Pedro Pareja que
venía algo retrasado, una vez todos juntos desistimos y continuamos carretera adelante
hacía el Canal Guadalmellato donde llama la atención la instalación
artesanal de una noria para sacar agua y regar las huertas.
Cruzamos
lugares próximos al Puente sobre el Gudalbarbo y varias huertas en
regadío viniendo a salir junto a la escaleras y rampa Paso Superior
sobre las vía del tren estación de Alcolea, antes de subir echamos
un vistazo a la higuera, está cargadita pero todavía les falta a
estos higos algún tiempo para su maduración.
Entramos
a la población a las 11,10 h. y Juan Gañán compró tomates y
cebollas en la verdulería-frutería de otras veces para hacer la
ensalada y al Bar Buggi-Bugui fuimos a parar, pidió dos fuentes, sal,
aceite y averiguó la ensalada conjuntamente con Félix que cayó
estupendamente y en el autobús de las 12,15 h. regresamos a Córdoba
con 20 km realizados de mucha dureza sobre todo la bajada de la
Alcaidía.
¡¡¡HASTA
OTRA!!!
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